LA SÁBANA SANTA DE LEPANTO
Las Agustinas Descalzas de Alcoy custodian desde 1599 el Santo Sudario que portó Juan de Austria en la legendaria batalla.
DIARIO INFORMACION: 17/01/2011*
Textos: Mario Candela --- Fotografías: Juani Ruz
Que existe un Santo Sudario y que está en Turín es de conocimiento universal; que hay una copia, de las más antiguas, en Alcoy, en la que se envolvió Juan de Austria mientras mandaba la flota cristiana en la batalla de Lepanto, y que custodian desde 1599 las hermanas Agustinas Descalzas del convento del Santo Sepulcro, ya no tanto. La Sábana Santa está guardada en una hornacina y protegida por un cristal para evitar su deterioro, tras haber estado depositada durante siglos en una arqueta chapada en oro. Antes se exhibía a los fieles cada 31 de enero, festividad del Jesuset del Miracle, pero ahora ya no, con el fin de preservar el vetusto y valioso lienzo.
https://www.informacion.es/alcoy/2011/01/17/sabana-lepanto-7058174.html
Que Cervantes había estado en Lepanto se estudia en la ESO, pero hay una parte de esta historia que afecta directamente a Alcoy, y que se escribió con letra más pequeña, pero que el cronista Rogelio Sanchis Lloréns investigó en los años cincuenta. El Papa Pío V obsequió con una copia del Santo Sudario a Juan de Austria, en el que "se envolvió durante la batalla", explica sor Pilar Coderch, actual superiora del convento; allí, en la contienda, a su lado, estaba su secretario, el alcoyano Juan Luis de Alzamora, que más tarde lo sería de Felipe II. Al finalizar sus servicios, y como sus paisanos le habían pedido que gestionara el jubileo para la capilla del Santo Sepulcro, obtuvo de manos de Juan de Austria esta "Síndona" para que la depositara en el templo.
La superiora y la hermana Aurora muestran la hornacina con la Sábana Santa / Juani Ruz
No hay fecha exacta de la donación, como señala también la madre Coderch, aunque todo apunta que fue en 1599, dos años después de la llegada de las religiosas a Alcoy. Está establecido, en cambio, que el 5 de enero de 1627 se donó una arqueta para conservarla, por parte de Vicente Juan de Alzamora, sobrino del anterior; este receptáculo fue restaurado hace una década y ha recuperado su esplendor original.
El monasterio del Santo Sepulcro surgió a raíz de un robo sacrílego, perpetrado el 29 de enero de 1568; fue un suceso que conmocionó a Alcoy -y por el que se dice que Felipe II cambió su atuendo- y que, gracias a la intervención de un labriego llamado Joan Esteve, acabó con la recuperación del sagrario y demás efectos robados, y le ejecución del autor, Joan Prats. Poco después se creó en el mismo sitio una capilla y el arzobispo de Valencia, San Juan de Ribera, puso la primera piedra del nuevo templo; en la misma época se creó el primer convento de las Agustinas Descalzas, según detallan la superiora y la hermana Aurora. Por ello, el citado robo, el convento y la Sábana Santa han ido de la mano desde finales del siglo XVI.
"Ha habido 92 copias de la original y esta es la décima", precisa sor Pilar; en el conjunto de España hay, o había, un total de 25, una menos de las 26 que hay repartidas por Italia, pero sin duda la que se conserva en Alcoy, que es la única de toda la Comunidad Valenciana, es una de las más importantes desde el punto de vista religioso y, sobre todo, histórico. La fecha de esta copia no está clara, a pesar de que en la misma figure la inscripción de 1571. Rogelio Sanchis indica que se materializó entre 1349 y 1532, debido a que en esa época la original estaba depositada en el castillo francés de Chambery y sufrió sendos incendios, mostrando la que está en Alcoy las huellas del primero pero no del segundo.
Las ocho hermanas del convento de Alcoy la cuidan con veneración y en estos momentos exhiben la faz frontal en una hornacina con cristal, después de que haya permanecido durante centurias en la arqueta, que tiene el escudo de los Alzamora. Que se sepa, esta copia solamente ha abandonado el templo entre 1936 y 1939, en que fue guardada "celosamente" por dos matrimonios en una vivienda de la calle San Blas y en una casa de campo próxima a Cocentaina; fue reintegrada el 11 de mayo de 1939.
Desde entonces, las Agustinas Descalzas han seguido venerándola y custodiándola. "Ahora ya no la enseñamos porque siempre se toca y acaba deteriorándose", resalta la superiora; este planteamiento ha tenido alguna excepción ocasional, con la visita de alguna personalidad o algún estudioso. De hecho, la "Síndona" de Alcoy tiene algunos zurcidos, posiblemente hechos por alguna "hermana del pasado", señalan la superiora y la hermana Aurora, y también -algo que ya detectó Rogelio Sanchis- manchas de cera, previsiblemente de cirios.
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| Imagen del acto de despedida y bienvenida en 2013 / Revista Ecclesia |
La conservación del lienzo, que las monjas exhiben con orgullo, es sin embargo más que buena para tratarse de una tela que puede tener perfectamente medio milenio y que, en su día, estuvo inmersa en una decisiva batalla.
"Una explosión de resurrección"
Las Agustinas Descalzas son una orden de clausura, basada en una mezcolanza de las reglas de la orden de San Agustín y de las constituciones de Santa Teresa de Jesús, que viven en pleno centro urbano de Alcoy, a apenas 80 ó 100 metros de la plaza de España. Las hermanas custodian las reliquias del Jesuset y realizan sus actividades cotidianas, aunque últimamente han sido noticia tras haber colgado vídeos en youtube con sus actividades, la historia del convento y sus particularidades religiosas, en lo que supone un importante paso en la utilización de los medios tecnológicos contemporáneos.
La vida religiosa sigue siendo, sin embargo, la parcela fundamental de su vida retirada. La Sábana Santa es parte de la misma. "¡Hay que ver lo que dura y lo que durará!", exclamó la madre superiora, que tuvo una frase tremendamente expresiva para explica la creación de la "Síndone" original. "Fue una explosión de resurrección", afirmó.
En estos principios de 2011, por último, las hermanas están recordando el 400 aniversario del padre fundador, San Juan de Ribera, que se cumplió el 6 de enero y que se ha conmemorado este viernes. También preparan la celebración de la fiesta del Jesuset a finales de mes.
* PD. Enero 2023. Dos años después, exactamente el 22 de febrero de 2013, las Agustinas Descalzas abandonaban el convento de Alcoy y se trasladaban al otro centro de la orden, en Benigànim. Una dolorosa decisión, motivada por la reducción de las comunidades y también por la edad creciente de sus componentes, que fue avalada por el entonces arzobispo de Valencia Carlos Osorio.
El convento no cerró, ya que inmediatamente se instalaron Carmelitas del Espíritu Santo procedentes de Brasil, más tarde reemplazadas por el colectivo actual, Servidoras del señor y de la virgen de Matará, que se ocupan del complejo y desarrollan su vida esperitual de clausura.
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